Las casas fábrica nacieron en plena industrialización urbana de Barcelona. Se construyeron fuera de los límites de la ciudad amullarada y las que sobrevivieron en el tiempo ahora son patrimonio urbanístico. Detrás de eso lleva casi un año el Ayuntamiento de Barcelona, protegerlas antes de que las derriben para liberar terreno en el centro de la ciudad. Ahora empiezan los trámites para catalogarlas como elementos industriales de interés patrimonial.
La Comisión de Gobierno ha aprobado una modificación del Plan Especial de Protección de Patrimonio arquitectónico Histórico y Artístico de Ciutat Vella. Con este cambio se podrá blindar inmuebles como estos elementos industriales de interés patrimonial mediante la catalogación a nivel B o C.
Estas casas se empezaron a construir en el siglo XVIII. El Raval era entonces un terreno agrícola aún por urbanizar y permitía a la creciente industrialización de la ciudad, la edificación de parcelas para los trabajadores de las fábricas. En esas parcelas había la residencia y el trabajo. Parte de ese patrimonio industrial que ha heredado la ciudad ha sido reconvertido en equipamientos públicos, como el caso de Can Batlló o Fabra i Coats, otros fueron derribados por a causa de iniciativas inmobiliarias o renovación arquitectónica debido al desgaste y abandono de esos edificios.
Cuando el Ayuntamiento anunció la intención de proteger esas casas fábrica, hace aproximadamente un año (en julio 2016), fue con la suspensión de licencia de 38 piezas industriales que corrían el riesgo de ser derribadas. En este tiempo han hecho un estudio de 64 localizaciones que incluye otras casas fábrica que ya estaban catalogadas pero se han incorporado para reforzar su nivel de protección.
Después de este estudio, siete ya estaban protegidas y se propone la protección de 19 más. En la próxima Comisión de Urbanismo deberán definir qué nivel de protección patrimonial le corresponde a las 26 casas seleccionadas. De esta forma, la modificación del plan de protección de patrimonio evitará que se pueda aumentar el volumen edificado, es decir, no se aceptará vivienda de nueva creación en estos edificios protegidos ni se podrá alterar los valores espaciales de la nave.